lunes, 19 de marzo de 2012

BENEFICIOS DE LA GRATITUD

1Tesalonicenses 5:12-18 (RVA) Os rogamos, hermanos, que reconozcáis a los que entre
vosotros trabajan, que os presiden en el Señor y que os dan instrucción.13 Tenedlos en
alta estima con amor a causa de su obra. Vivid en paz los unos con los otros.14                        
Hermanos, también os exhortamos a que amonestéis a los desordenados, a que alentéis a
los de poco ánimo, a que deis apoyo a los débiles, y a que tengáis paciencia hacia todos.
15 Mirad que nadie devuelva a otro mal por mal; en cambio, procurad siempre lo bueno
los unos para los otros y para con todos. 16 Estad siempre gozosos.17 Orad sin cesar.18
Dad gracias en todo, porque ésta es la voluntad de Dios para vosotros en Cristo Jesús.

Al leer este pasaje nos queda absolutamente claro que la voluntad de Dios para con
nosotros es que seamos agradecidos.

#1: Ser Agradecido me da una Perspectiva Diferente de la Vida.

La gratitud nos hace ver las cosas de manera diferente. Como alguien dijo: “Yo me
lamentaba por no tener zapatos, hasta que conocí a un hombre que no tenia pies”.

Colosenses 3:15 (BLS) Ustedes fueron llamados a formar un solo cuerpo, el cuerpo de
Cristo. Dejen que la paz de Cristo gobierne sus corazones, y sean agradecidos.

#2: Ser Agradecido Trae Sanidad a Mi Vida

Lucas 17:12-19 (PDT) Al entrar a cierto pueblo, diez leprosos salieron a encontrarlo. Se
quedaron parados a lo lejos, 13 y le dijeron en voz alta: -¡Jesús, Maestro, ten compasión
de nosotros! 14 Al verlos, Jesús les dijo: -Vayan y preséntense ante los sacerdotes.
Mientras iban a los sacerdotes, fueron sanados.15 Cuando uno de ellos vio que había
sanado, regresó a donde estaba Jesús, dando gritos de alabanza a Dios.16 Se arrodilló y
se inclinó hasta el suelo ante Jesús y le dio las gracias. Este hombre era un
samaritano.17 Jesús respondió: -Diez hombres fueron sanados, ¿dónde están los otros
nueve? 18 ¿Este hombre que ni siquiera es judío es el único que regresó a darle gracias
a Dios? 19 Entonces Jesús le dijo: -Levántate y vete, porque tu fe te ha sanado.

En la Biblia la palabra para salvación y salud se intercambian muchas veces como
sinónimos. Este es el caso en este pasaje. Solo este hombre que regreso para agradecer a
Jesús por su sanidad, fue salvo también, no como los demás que tan solo recibieron la
sanidad de sus cuerpos.

De igual manera nosotros no solo necesitamos sanidad física, sino también de nuestra
alma. La gratitud trae esa sanidad, una completa sanidad. Un corazón agradecido, abre
la puerta para los milagros.

#3 La Gratitud me Recuerda la Bondad de Dios.

Salmo 103:1-5 (DHH) Bendeciré al Señor con toda mi alma; bendeciré con todo mí ser
su santo nombre. 2 Bendeciré al Señor con toda mi alma; no olvidaré ninguno de sus
beneficios. 3 Él es quien perdona todas mis maldades, quien sana todas mis
enfermedades, 4 quien libra mi vida del sepulcro, quien me colma de amor y ternura, 5
quien me satisface con todo lo mejor y me rejuvenece como un águila.

El salmista tenía la costumbre de recordar todos los beneficios recibidos de parte de
Dios, eso hacía de él un hombre agradecido y por consiguiente, sano y feliz.
También nosotros necesitamos recordar – incluso obligarnos a recordar- la bondad de
Dios constantemente, para no pecar por falta de gratitud. El no dar gracias a Dios, fue
uno de los pecados más grandes del hombre. Mire lo que nos dice la Biblia…

Romanos 1:21 (BL95) A pesar de que conocían a Dios, no le rindieron honores ni le
dieron gracias como corresponde. Al contrario, se perdieron en sus razonamientos y su
conciencia cegada se convirtió en tinieblas.

Como Cultivar La Gratitud
· Haciendo de la Gratitud un Hábito;
· Diga siempre “gracias”.

Efesios 5:20 (BLS) Denle siempre gracias por todo a Dios el Padre, en el nombre de
nuestro Señor Jesucristo.

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